Inteligencia Emocional en la Familia
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La vida en Familia es nuestra primera escuela para el aprendizaje emocional; en esta caldera aprendemos como sentirnos con respecto a nosotros mismos y como reaccionarán los demás a nuestros sentimientos: a pesar sobre esos sentimientos y que alternativas tenemos; a interpretar y expresar esperanzas y temores. Esta escuela emocional no solamente opera a través de las cosas que los padres dicen o hacen directamente a los niños , sino también en los modelos que ofrecen para enfrentarse a sus propios sentimientos y a los que se producen entre marido y mujer.
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La forma en como los padres tratan a sus hijos tiene consecuencias profundas indelebles y de muy probable posterior aparición en la vida emocional de su hijos.
Tres estilos de paternidad que debes evitar: >Ignorar los sentimientos en general: tratar las aflicciones emocionales de sus hijos como algo aburrido que hay que esperar hasta que le pase. No ven en esos desarrollos emocionales la oportunidad para acercarse a su hijo y darle lecciones emocionales. >Mostrarse demasiado permisivos: padres que se dan cuenta de lo que pase con su hijo pero afirman que sea cual fuere la forma como el niño(a) enfrente esos problemas es la manera adecuada, incluso si es... a golpes. Se caracteriza por en serio ni de las forma mas afectiva las situaciones emocionales de sus hijos. Llegan incluso a sobornarlos con regalos, dinero o permisos para que ca,bien y sean como los padres lo imaginan. >Mostrarse desdeñoso y no sentir respeto por los sentimientos del hijo: son padres típicamente des-aprobadores y exageradamente duros, tanto en sus criticas y castigos, los cuales se caracterizan por incluir violencia física. Hay padres que a la menor oportunidad de un trastorno emocional del hijo actúan como entrenadores emocionales. Toman los sentimientos de sus hijos con la suficiente seriedad para lograr entender exactamente lo que les preocupa, tratan de ayudar a sus hijos encontrando formas positivas de aliviar los sentimientos, que el pueda buscar las soluciones mas asertivas y enfocándose en los sentimientos del niño(a) y no en la situación que la causado. Los padres que son emocionalmente competentes establecerán mejores relaciones con sus hijos. |